¿Cuáles son los efectos que puede tener en la piel la luz azul que emiten los dispositivos electrónicos? ¿Me pueden salir manchas en la cara a causa del uso/abuso del móvil?
La llamada contaminación digital no sólo repercute en la salud psíquica (falta de concentración, sobre estimulación nocturna, falta de rendimiento, insomnio…), sino también con el estado de la piel. Y ahora que estamos muchas horas frente al ordenador y más durante el confinamiento por coronavirus, nos planteamos los posibles efectos adversos del exceso de luz azul. Ordenadores, móviles y televisores forman parte de nuestro día a día y es difícil imaginarnos una vida sin ellos. Sin embargo, la luz azul que emiten estas pantallas tiene unas consecuencias en nuestro cuerpo y ciertos riesgos para nuestra piel, que no deberíamos infravalorar. Uno de los efectos de la luz azul pueden ser las manchas en la piel.
QUÉ ES LA LUZ AZUL
Se empieza a considerar que ya no podemos conformarnos con una simple protección solar, hay que usar las de amplio espectro, porque se sabe que los daños en la piel no sólo se producen por la radiación ultravioleta (A y B) y los infrarrojos, sino también a causa de la luz visible. Parte de esta es la luz azul, que es la que emiten los dispositivos y la luz led: la emiten los móviles, ordenadores, y muchos de los aparatos electrónicos que utilizamos.
¿QUÉ EFECTOS PRODUCE EN LA PIEL?
Manchas y fotoenvejecimiento, principalmente. Además, al ser considerada como otra forma de contaminación lumínica, supone una agresión para la piel, y como tal produce estrés en la misma y genera radicales libres que pueden romper las estructuras celulares a largo plazo, y como consecuencia, disminuye la elasticidad de la piel, en especial en las zonas de la barbilla y los pómulos, donde se eleva el riesgo de manchas de pigmentación y arruguitas.
La luz azul impide la síntesis de melatonina, que facilita el descanso además de poseer propiedades antioxidantes y anticancerígenas. Así que exponerse mucho a las pantallas en las últimas horas del día, hace que la piel sea más proclive al envejecimiento.
Además de colaborar en los procesos de pigmentación de la piel, la luz azul facilita la reaparición del melasma (mancha en el rostro inducida por cambios hormonales: embarazo, anticonceptivos orales, etc…), y produce arrugas, y pérdida de firmeza y elasticidad.
PROTECTOR SOLAR ¿EN CASA?
Puede parecer exagerado, pero usar una crema o maquillaje ligero con filtros solares de alto espectro blinda la piel, minimizando los posibles riesgos de manchas y envejecimiento prematuro que acechan tras largas jornadas de teletrabajo. Y más si tu rincón de trabajo está frente a una ventana, lo que, por otra parte, también es fuente de múltiples beneficios.